Tu cuerpo ésta influenciado por tu mente, y tu mente ésta influenciada por los procesos químicos y hormonales de tu cuerpo, y tus emociones están influenciadas por la forma en que cuidas a tu cuerpo y tu salud en general. Ese es el poder de la conexión.
La relación Mente-Cuerpo significa aprender a escuchar, aprender a entender los mensajes que el cuerpo te está mandando y darle a tu cuerpo realmente lo que necesita. Si cuidas a tu cuerpo físico, tu mente se va a beneficiar. Y si tu mente se beneficia, te encontrarás mejor equipado para cuidar tu cuerpo físico.

COMO TE TRATAS ESTÁ DIRECTAMENTE RELACIONADO EN COMO TE SIENTES
La elección que haces en lo que comes, bebes, si duermes lo suficiente,
y como te mueves están conectadas en el tipo vida que vas a crear.

Te presentamos 10 tips para armonizarte con tu cuerpo

1. Escucha a tu cuerpo: ¿Tienes hambre? O ¿Ansiedad? ¿Estás saturado del mismo ejercicio? ¿De comer todos los días lo mismo? ¿De tus vitaminas? ¿Identificas realmente cuando es hambre? Honra tu hambre, date permiso de comer pero con hambre.
2. Reconoce tus niveles de saciedad o satisfacción: Termina un 80% satisfecho cada comida, disfruta terminar ligeramente satisfecho, cómodo, siempre puedes volver a comer pero con hambre. No es lo mismo terminar lleno, sin energía, desabrochándote el pantalón con culpa y enojo por esos dos bocados de más que no vinieron al caso.
3. Enfócate en comer con atención plena en el aquí y en el ahora; Come despacio, mastica varias veces los alimentos, pausa entre cada bocado, y sobre todo cuida tus porciones. El cerebro tarda 20 minutos aproximadamente en recibir la señal de satisfacción.
4. Rompe tus malos hábitos antes de que ellos te rompan a ti: Sustituye un hábito poco sano por uno más sano, por ejemplo; en vez de tomar mucho café sustitúyelo por té verde, té de canela o de jengibre.

5. Planea en forma inteligente: es importante tener siempre en tu refrigerador sopa de verduras, consomé de pollo, arroz hervido, quinoa hervida, frijoles, lentejas, verdura cocida y cruda.
Siempre lleva contigo un jugo verde, unas verduras crudas con humus o con chile y limón, una bolsa con nueces, almendras o ensalada de atún o palmitos.
En tu oficina ten a la mano barritas integrales, almendras, nueces, atún, palmitos o palomitas sin grasa. Te ayudará en caso de hambre, recuerda no comer lo primero que se te ponga en frente. Te permite cuidar tus colaciones y cuidar a tu cuerpo con alimentos funcionales y verdaderos .
6. Anticipa: Si sabes que vas a tener una comida o cena abundante con alimentos o bebidas altas en calorías, cuida tus comidas anteriores, ahorra calorías y toma sólo un licuado de proteína . Consume una sopa de verduras o ensalada antes de un evento o comida para no llegar con hambre.
7. Desayuna proteína: Un licuado, huevos al gusto o rollitos de pavo con jitomate y aguacate. O proteína vegana como tofu, soya, quinoa, semillas, yogurth de almendras, amaranto, etc. (Estudios muestran que la gente que desayuna proteína es menos ansioso). Si desayunas proteína te ayuda a estar más satisfecho durante el día, si desayunas hidratos de carbono, provoca más ansiedad durante el día y la calidad de alimentos que escoges tienden a tener más azúcares y harinas refinadas, si no desayunas acabas comiendo lo primero que cruce en tu camino.
8. Rotación y variedad: No satures tu cuerpo de lo mismos alimentos, mismas vitaminas, mismo ejercicio, etc. Trabaja diferente, crea nuevas conexiones, nuevos sabores, nuevos platillos, mueve tu cuerpo en forma diferente.
9. El reto mayor es ser constante. Para lograr que algo trabaje, que se mantenga y que veas los resultados, depende de una sola cosa: consistencia y disciplina. El reto no es empezar algo, adelgazar unos kilos, es mantenerte motivado.
”Nuestros cuerpos cambian y nuestro estilo de vida también. Aprende a escuchar tus señales, a respetarlas y a cuidar a tu cuerpo todos los días”.